martes, 13 de enero de 2009

La vida en la frontera


Nos encontramos siempre en la frontera, en la línea divisoria del bien y del mal. Las circunstancias que rodean nuestras vidas hacen que nos encontremos en muchas ocasiones en una duda razonable.

El calor de una melodía que resuena en mi cabeza insistentemente calma mis impulsos. Esas notas que me vienen una y otra vez pertenecen al buen hacer de un grupo español llamado Radio Futura (¿habrá alguien que no los conozca?).

Aparecen ante mis ojos unas notas que dicen:

A veces sopla un viento triste y frío
los días son igual que una condena
de noche se oyen voces que murmuran
un nombre donde sólo hay silencio

Si cruzas por aquí, sé precavido
si alguien te sale al paso no le des la espalda
es bueno hallar con quien hablar, a veces
pero es mejor callar cuando es preciso

No sueñes con el final del camino
pues ya, maldita sea, otros aguardan
para tomar su parte y ganarte
la mano sin moverse del sitio

La vida en la frontera no espera
es todo lo que debes saber

Hay hombres con miradas que fulminan
como el rayo penetra en carne viva
si matas generas un espectro
que siempre ya persigue y acecha

Bailan las mujeres en la hoguera
desnudas, con el rostro cubierto
aquella que concibe tu hijo también
acaba con las voces de lo incierto en ti

Si tienes que jugártelo a una carta
ve de cara al decir tu palabra
pero antes de que el eco la repita
Dios y el diablo te ayuden a estar lejos.
(Gracias por todos esos momentos que me han hecho vibrar con sus canciones)